Escribí doscientas cartas que nunca enviaré.
A veces estas cortadas son más profundas de lo que parecen;
tu prefieres cubrirlas, yo prefiero dejarlas libres.
Así que déjame ser y yo te liberaré.
Estoy en la miseria, no hay nadie que pueda consolarme
¿Porqué no me contestas? El silencio me esta matando lentamente